Para que los Dodgers lograran el bicampeonato no bastó con su talento puro, sino que se basaron en una estrategia bien pensada y ejecutada, respaldada por la mayor apuesta del equipo hasta la fecha: sus tres lanzadores japoneses.
En primer lugar, la estrella Shohei Ohtani firmó un contrato de 10 años por valor de 700 millones de dólares ,. A continuación llegó Yoshinobu Yamamoto, que firmó un contrato de 12 años por valor de 325 millones de dólares , según True Blue L.A., el mayor de la historia para un lanzador en aquel momento. Y por último, el fenómeno en ascenso Roki Sasaki, cuyo fichaje incluía una cuantiosa prima de fichaje de 6,5 millones de dólares, según informa también True Blue L . A..
La suma total se cita a menudo como «más de 1.000 millones de dólares» para una inversión que dio sus frutos tanto en el campo como económicamente. Al tiempo que los Dodgers hacían historia, consiguiendo dos títulos consecutivos de las Series Mundiales, también consolidaban su marca global y su poder de estrella en todo el mundo.
Un fenómeno global made in L.A.

En Japón, el primer partido de las Series de Tokio de 2025 tuvo una media de más de 25 millones de telespectadores, un récord para un partido de la MLB en ese país, como afirma Fox Sports. Mientras tanto, la CNBC informó de que las ventas de productos relacionados con Ohtani en Japón representaron el 57% de todas las ventas de la MLB, mientras que las ventas totales de merchandising de los Dodgers se dispararon un 2.000% .
En Corea del Sur, el partido inaugural de las Series de Seúl de la MLB atrajo a 18,7 millones de telespectadores, un récord que sólo fue superado posteriormente por las cifras de las retransmisiones de Tokio . Asimismo, en Taiwán, los índices de audiencia de los partidos en los que participó el equipo de Ohtani aumentaron un 84% en comparación con los encuentros en los que no participó, según la revista Time.
Sin duda, la inclusión de estos jugadores va mucho más allá del diamante, ya que están transformando la forma en que se percibe el béisbol en todo el mundo. Con Ohtani, Yamamoto y Sasaki a la cabeza, los Dodgers están pasando de ser una potencia estadounidense a una marca global que podría convertirse en un nombre familiar, como los Lakers, el Barcelona o los All Blacks… Equipos cuyo legado trasciende el deporte y se convierte en parte de la cultura global.