Las altas temperaturas significan algo más que ir a la playa, encender la parrilla o tomar una cerveza fría bajo las estrellas. Para los que viven en el sur de California y tienen la suerte de tener piscina, los meses más calurosos del año también señalan la posible llegada de unos visitantes peludos, adorables, corpulentos y muy curiosos: ¡los osos negros!
Según Mackenzie Rich, especialista en conflictos entre humanos y animales salvajes del Departamento de Pesca y Vida Silvestre de California, los osos negros suelen refrescarse en las piscinas y estanques de los patios traseros, y son grandes aficionados a los árboles frutales y a las semillas para pájaros. En algunos casos, incluso se han colado en las cocinas de la gente, explica a LAist.
Los osos suelen bajar de las montañas de San Gabriel y, ahora que la temporada de barbacoas está en pleno apogeo, el irresistible olor de la comida puede acercarlos a las casas de todo el sur de California. Por otro lado, las piscinas de los patios traseros no son sólo una tentadora fuente para saciar la sed: también ofrecen un lugar perfecto para refrescarse, como lo haría un estanque salvaje, y todos sabemos lo mucho que les gusta el agua a estos peludos amigos.
Para evitar atraer involuntariamente a los osos a su jardín, el Departamento de Pesca y Vida Silvestre de California insta a los residentes a tomar medidas preventivas como:
- Guardar la basura, el compost y el reciclaje en contenedores a prueba de osos.
- Recoja la fruta madura y retire los productos caídos.
- Limpie y guarde siempre las barbacoas adecuadamente.
- Mantenga las ventanas y puertas cerradas cuando no esté en casa.
- Lleve a sus mascotas al interior por la noche.
Los osos tienen un excelente sentido del olfato, por lo que incluso los artículos muy perfumados , como la crema solar, pueden tentarlos. Eliminar los elementos que los atraen y bloquear el acceso a posibles guaridas (como sótanos o cobertizos abiertos) puede contribuir en gran medida a evitar visitas indeseadas.
Si todo lo demás falla y, por un extraño golpe de suerte o un mal momento, tu jardín se convierte en la zona de chapoteo personal de un oso , cachorros incluidos, que no cunda el pánico. Según Rich, si estás dentro de casa y ves un oso fuera, lo más seguro es dejarlo en paz. Puesto que el animal está confinado en tu jardín, no se trata de compartir el espacio, sino de evitar cualquier interacción innecesaria.
Mantén la distancia, no te enfrentes al animal y, por supuesto, no intentes hacerte el héroe. Recuerda que tu casa puede formar parte del hábitat natural del oso y que lo único que quiere (igual que tú) es refrescarse del calor veraniego. Una vez que lo haya hecho, lo más probable es que se vaya.
Mientras tanto, puedes informar del avistamiento al CDFW o llamar al (858) 467-4201 para que puedan gestionar la situación de forma segura tanto para el oso como para la comunidad.
La mayoría de los encuentros entre osos y humanos son pacíficos y no acaban más que en una buena anécdota, así que si uno «invade» tu piscina, no te asustes… ¡Intenta grabar un bonito vídeo que puedas compartir en las redes sociales!