Las vacaciones deberían ser una auténtica escapada, no una lista de actividades sin fin. Imagínese paseando por colinas iluminadas por el sol, bebiendo vino local o simplemente sentándose y disfrutando de la calma. Los días pasan más despacio, los momentos parecen más largos y las pequeñas cosas (como una calle tranquila o una vista panorámica) se convierten en lo más destacado. Es el tipo de viaje que realmente parece un descanso.
Y parece que, según el Atlas Mundial, Paso Robles es una de esas ciudades californianas que ofrece precisamente eso. La ciudad acaba de ser nombrada uno de los lugares más libres de estrés del estado, y es fácil entender por qué. La ciudad es pequeña, los alojamientos son de primera categoría y el tiempo es agradable y soleado la mayor parte del año. Si a esto le añadimos colinas onduladas y calles tranquilas, es el tipo de lugar en el que realmente se puede ir más despacio y disfrutar del momento, sin horarios ni prisas.
Pasee, saboree y vea lo que Paso Robles puede ofrecerle
Las tardes tranquilas son perfectas en Tin City. Esta antigua zona industrial está ahora repleta de pequeñas bodegas, cervecerías artesanales, destilerías y restaurantes locales. Aquí podrá degustar vino fresco o tomar un bocado mientras explora los divertidos y coloridos espacios.
La noche, por su parte, puede convertirse rápidamente en un paseo surrealista en Sensorio. En esta instalación inmersiva, miles de luces resplandecientes cubren las colinas por la noche. Caminar por estos senderos suavemente iluminados resulta mágico, y es una forma perfecta de disfrutar del aire libre mientras se contempla algo realmente único.

Para un descanso relajante, las aguas termales de la zona son difíciles de superar. River Oaks ofrece spas de lujo y servicios de alta gama, mientras que Franklin Hot Springs es ideal para familias, con pesca y paseos en barco. Ambos lugares cuentan con bañeras minerales naturales perfectas para relajarse tras una semana ajetreada.
Por último, los aficionados a la historia y la cultura pueden explorar la Misión de San Miguel Arcángel. Este legendario rincón de la ciudad muestra las primeras raíces de la zona con sus bellos frescos y su arquitectura clásica española. Y a poca distancia en coche, el Castillo Hearst ofrece un vistazo a la época dorada de California con sus impresionantes habitaciones, jardines y piscinas.